Por: Alpidio Rolón
El bastón blanco es a la vez un instrumento de independencia, seguridad e igualdad. Con él, la persona ciega no depende de otros para moverse de un sitio a otro, está menos propenso a accidentarse y le permite integrarse a la sociedad en igualdad de condiciones. Sin duda, antes de que surgiera el bastón blanco, especialmente el bastón largo que usamos en la National Federation of the Blind, algunos ciegos se valían de instrumentos similares para caminar.
En 1963, National Federation of the Blind aprobó una resolución en la que solicitaba que los gobernadores declararan el 15 de octubre de cada año como Día del Bastón Blanco. Al año siguiente, el Congreso aprobó una resolución conjunta que autorizaba que el Presidente declarara dicho día como Día del Bastón Blanco. En Puerto Rico, la Legislatura a instancias de NFB de Puerto Rico, aprobó el proyecto de ley que presentamos, que se convirtió en la Ley 129 de 1995, conocida como Ley del Bastón Blanco. Esta ley no solo da al traste con la Ley 169 de 1940, que establecía que los ciegos debían tener un carnet con las huellas digitales de la mano derecha si caminaban con un bastón por las calles de Puerto Rico, sino que reconoce su derecho a tener su bastón en cualquier lugar público. Reconociendo así, que los ciegos tenemos los mismos derechos y responsabilidades en la sociedad.

A través de los años, NFB experimentó con distintos tipos de bastones —madera, aluminio, fiberglass (sólido y hueco) y fibra de carbón— y concluyó que el bastón largo —que llegue al menos a la barbilla de la persona— es el que mayor independencia y seguridad brinda a los ciegos. Contrario a a los bastones cortos, el bastón largo ofrece un margen de al menos dos pasos para que la persona pueda evitar o detenerse ante cualquier obstáculo. La NFB usa al presente bastones largos hechos de fibra de carbón, que son a la vez fuertes y livianos.

El bastón blanco es para National Federation of the Blind un instrumento que distingue a la persona ciega, y no un estigma como algunos piensan en la sociedad. Combinado con destrezas de orientación y movilidad, el bastón blanco brinda a los ciegos la oportunidad de ocupar su lugar en la sociedad como ciudadanos de primera clase.